Los caracoles siempre se han comido mucho en mi casa. Desde que era pequeña recuerdo ir a buscarlos con mi padre en las noches de verano, después de un buen chaparrón pertrechados con una linterna y un palo para mover las hierbas. Era una aventura que me fascinaba. Luego mi madre los cocinaba y era un manjar. Pero yo nunca los había cocinado. Cuando hace poco me regalaron unos pocos, pregunté a mi madre e investigué un poco en Internet. Esta receta es una mezcla de las mil posibilidades que he visto y la he adaptado a nuestro gusto. Creo que ha salido buena.
Los ingredientes
- Caracoles
- Sal
- Laurel
- Cebolla
- Pulpa de Pimiento choricero (puede ser de bote)
- Tomate natural triturado (puede ser de bote)
- Chorizo
- Tocino
- Huevo cocido
- Guindilla
Yo utilizo el pimiento choricero de bote porque es muy rico y mucho más cómodo. Si utilizas pimientos choriceros naturales previamente tendrás que remojarlos en agua caliente para que se ablanden y puedas sacar la pulpa. Se hace raspando con un cuchillo.
La preparación
- Comienza lavando muy bien los caracoles (en el apartado "TRUCOS" de este blog te explico cómo hacerlo).
- Una vez limpios colócalos en la olla cubiertos con agua fría y déjalos un rato reposando hasta que veas que van sacando el cuerpo de la cáscara.
- Pon la olla a fuego muy bajo y cuando veas que tienen los cuerpos fuera sube el fuego hasta que el agua hierva. Esta operación es muy importante para que la carne del caracol asome de la cascara y a la hora de comerlos se pueda sacar con facilidad.
- Tira el agua porque estará lleno de espuma y vuelve a echar agua fría. Añade la sal y una hojita de laurel. Pon a cocer durante 1/2 hora. Si en vez de la olla a presión utilizas una cazuela deberán de cocer mucho más tiempo. Pruébalos para ver cuando están tiernos. Reserva.
- Mientras los caracoles están cociendo, prepara la salsa. Pon una sartén al fuego y echa el tocino y el chorizo, cortados en taquitos pequeños. Cuando estén fritos retíralos y reserva.
- En la grasa que ha quedado en la sartén (si es mucha quita un poco) fríe la cebolla picada y cuando esté dorada añade unas cucharadas de tomate (no mucho porque no vamos a hacer una salsa de tomate) y los pimientos choriceros.
- Deja hacer un rato y añade el tocino y el chorizo. Es también el momento de añadir un guindilla (si te gustan un poco picantes). Aligera la salsa añadiendo un poco del caldo de cocer los caracoles pues esta salsa no debe de quedar muy espesa.
- Escurre bien los caracoles y añádelos a la salsa. Da un hervor para que se mezclen bien los sabores y añade el huevo cocido cortado en trocitos pequeños. Prueba y añade sal si fuese necesario.
Cómo todos los guisos estarán más ricos si los cocinas con antelación.
Mi Receta
CATEGORÍA: SEGUNDOS PLATOS
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